martes, 14 de abril de 2009

Cordura absorta

Después de la muerte de Javier todo cambió en la casa. La sala, los cuartos, el comedor, y hasta el jardín cobraron un aspecto tétrico, daba la impresión de ser, más que una casa, un hospicio bajo el gobierno de la insanía y la apatía. Mi abuela y yo también fuimos victimas de este cambio: nos arreglabamos poco o nada, no teníamos ganas, daba igual tener el cabello tieso y oloroso, las uñas largas, naúfragas, como buscando aterradas tierra firme; los ojos duros quizá por la legaña acumulada o quizá por el vacío repentino que dejó Javier en la casa. Todo se descordinó, no sólo las cuentas, los pagos, el orden, sino también nosotros: éramos como títeres sin alguien que nos guie, que nos maneje, teníamos movimientos vagos y torpes.
La más afectada fue mi abuela, andaba perdida y asustada, como extravíada en su propia casa. Todos los días llevaba un plato de comida al cuarto donde yacía triste y sola la mecedora de Javier, en donde él se sentaba antes a fumar y beber un poco, y solia escribir errante versos que nunca tuvieron ni un ápice de poesía. Le preguntaba el porqué de su falta de apetito, jugaba a acariciar su cabello, le contaba viejas historias, viejas travesuras que él realizó cuando niño. Yo la miraba temeroso y apenado, temía por su cordura, veía como cada día se diluía más en la ilusión de estar con su hijo: no asimilaba aún la muerte de éste.
Yo mismo no pude resistir la tentación de sentarme junto a la mecedora para imaginar que conversaba con Javier, incluso llegué a reirme de lo que él me decía. Estar junto a la vieja mecedora se volvió un vicio. Me despertaba a cualquier hora de la madrugada para ir a sentarme junto a ella para conversar un rato más, quería contarle más cosas, y veía a mi abuela sentada cantando una canción o contando un cuento para Javier;la odiaba, quería que se largase ya para que me dejáse el espacio a mí.
Así pasaron semanas o un mes o dos meses, ¡quién sabe!, sólo me interesaba estar en ese cuarto. Llegamos a tener un aspecto muy distante al de un ser vivo; las ojeras pintaban de lleno nuestros semblantes, la piel estaba cuarteada y pálida, los dientes abrazados al sarro. Dejamos de andar como personas para vagar como simples espectros, andabamos, sí, pero siempre en dirección al viejo cuarto.

Después de la muerte de Javier todo cambió en la casa, salvo que el cádaver de Javier seguía sentado en la tersa silla de caoba, absorviendo nuestra vida cada día un poco más.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

:o ... nu soy un experto en este campo ( ... sea cual sea el nombre de este campo... por algo no soy experto .. xD) ...pero si estuvo chevere hehe ... aunke nu se sintio lo mismo ke con la anterior..."Hastío"...como que le falto un poco de... como decirlo... que sea un poco mas tetrica o algo asi... jeje... pero aun asi estuvo buena... =D KF.

Anónimo dijo...

wow stá bueno...aunque parece q ambos perdieron completament la razon!
esta de la ptm, me gustan bastant tus historias, sigue escribiendolas piero q son xvrs!!!

MaRio! xD

Unknown dijo...

estaaa muyyy chvrrr
siguelee escribiendo asii!!
esta de la ptm!!!
sanuqe sii concuerdo con mario que puerde la razon los 2 tiposs

Anónimo dijo...

Peliarse x una persona
q solo vive en sus recuerdos

Q interesant
(:


aleka

Anónimo dijo...

sabes xq eres tan bueno?

porq l pones mucha vida y mucha energia atus historias
eso ace una lectura amena e interesante y no las cosas q leemos oy en dia sin un sentido mas q superficial

Anónimo dijo...

muyyy buena, pero como qe la ubieras seguido para qe ponga a pensar más a la gente
iwal estubo buenisima ;D

marcelarga, duuh

Anónimo dijo...

scribs muy bn ia t lo e dixo io..otras mils d prsonas...

pero ncerio..si son muy buenas...ste lo e leido sin k m lo pacs..too x la kuriosidad d.."k abra scrito piero aora"...

me guzto aunk..talvz pudo ser un tok mas largo..xD!:..

Buji!!...

Anónimo dijo...

estaa demasiaadoooo vakaan!
soloo me faltaban terminar unos cuantos parrafos!!
el ultimoo me confundioo un pocooo =S
peroo esta demasiadoo cheveree!

Anónimo dijo...

recuerdos......

ya piero, esta bonito


harold

Anónimo dijo...

Vivir de tus recuerdos,
vivir solo para vivir los recuerdos;
para recordarlos

vivir solo para eso

quizá ese sentido tiene la vida
por lo menos lo tiene la vida de esas 2 personas...

me encantó más que nada,
Berchi:)